“El estrés no es un enemigo, es un medio para desarrollar tus habilidades y fortalezas, pero cuidado con dejarse llevar por ella porque puede ser tóxica y te puede llegar a enfermar” W. Barzola

El Estrés es una respuesta adaptativa que el hombre utiliza y que forma parte de él desde hace millones de años, los hombres nómades tenían que salir a cazar animales para probar alimento y cubrir sus necesidades básicas de alimentación para su sobrevivencia; en estas actividades de casería se activaba continuamente el sistema lucha-huida en sus cerebros, este sistema  anatómicamente está constituida por el circuito límbico, entre ellos la amígdala cerebral, que se activan ante la señal de PELIGRO ya que los animales también se defendían y muchas veces atacaban al hombre; este mecanismo funciona como una SEÑAL DE ALERTA para el sistema nervioso central, el autónomo, el sistema inmune y hasta el sistema endocrinológico; por tanto cuanto uno más se exponga a situaciones estresantes esta respuesta pasa de un estado de tranquilidad a un estado de eficiencia donde la persona obtiene su mejor desempeño en esta etapa; pero si las situaciones que generaron esta respuesta persiste en el tiempo vamos a pasar de la eficiencia a la fatiga, al cansancio y por último a la ansiedad patológica, siendo ésta última generadora de perjuicios para el individuo tanto en la salud física como en la salud mental. Te has percatado del aspecto que lucen las personas que viven en piloto automático se les nota en su rostro como cansados y más envejecidos; se acuerdan del presidente Barack Obama cuando ingresó a su mandato como presidente de los Estados Unidos ¿Cuál era su aspecto? y después cuando finalizó su mandato, terminó con el cabello blanco y más arrugado; la gestión de un País es de alta exposición a situaciones estresantes, es el precio que pagan muchas veces los políticos porque se deteriora su salud mental y física; con esto no les digo que no se metan a la política sino que hay que tener las habilidades necesarias para afrontar tales situaciones; entonces nace la siguiente interrogante ¿Debemos exponernos a situaciones que nos generen estrés? La respuesta es SI, y de esto lo conocen muy bien los deportistas de alto rendimiento, ellos le sacan el máximo provecho al estrés, ya que ejercen rutinas de preparación para obtener su mejor desempeño, entonces ¿Dónde está el problema? El problema está cuando nos exponemos a períodos largos de situaciones estresantes como: Alta presión laboral, malas relaciones interpersonales, múltiples tareas a realizar, demasiado sentido de responsabilidad de algunas personas entre otras. Inicialmente ante estas exigencias el ser humano utiliza sus mecanismos de afronte para hacerles frente, pero estos se van agotando poco a poco, es necesario aclarar que cada persona tiene su propio nivel de tolerancia al estrés y en algunos casos su umbral puede ser bajo, en otros alto, dicho umbral depende de sus experiencias y preparación previa; la pregunta en esta parte sería ¿Se puede hacer una preparación previa para gestionar el estrés? Desde luego que SI, yo creo que en nuestros currículos escolares debiéramos integrar los conocimientos de la Inteligencia Emocional, así como la educación financiera básica; con esas dos estrategias ahorraríamos muchos problemas a nuestra población.