¿Cómo identificar y prevenir la conducta suicida?
Acerca del Perú y en cuanto Conducta suicida. ¿Sabías que cada año, millones de personas luchan en silencio contra pensamientos suicidas? En Perú, en los últimos seis años, se registraron 5.372 intentos de suicidio (69%) en mujeres, 2.408 (31%) en hombres y otros siete en los que no se precisó el género. La mayoría de los casos se concentró en la población joven (3.669). El menor grupo está en los menores de 11 años (96 casos), seguidos por los adultos mayores (162). Aunque es relativamente baja comparada con otros países, sigue siendo una preocupación importante.
Si bien la conducta suicida es un problema grave de salud mental, pues afecta a millones de personas en todo el mundo. Por ello es importante comprender y reconocer los signos de alerta, crucial para salvar vidas. Reconocer estos indicadores puede marcar la diferencia entre actuar a tiempo o enfrentar consecuencias graves.
¿Qué es la conducta suicida?
La OMS define al acto suicida como toda acción por la que un individuo se causa un daño a sí mismo, con independencia del grado de intención y de que conozcamos o no los verdaderos motivos, y el suicidio como la muerte que resulta de un acto suicida. Asimismo, la conducta suicida abarca una gama de comportamientos desde los pensamientos suicidas hasta los intentos de suicidio.
Signos de alerta
- Cambios en el comportamiento
- Expresiones de desesperanza
- Declaraciones o amenazas de suicidio
- Búsqueda de medios para suicidarse
- Cambios emocionales
- Aislamiento
- Insomnio o hipersomnia
- Conductas autolesivas
- Aumento del consumo de sustancias
- Baja autoestima
- Búsqueda de medios para suicidarse.
Nota: Si conoces a alguien que está comportándose de manera inusual y diferente a su forma habitual, es fundamental que hables con él para averiguar qué podría estar sucediendo.
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Estrategias de prevención
- Es de suma importancia fomentar el diálogo abierto, para que las personas se sientan cómodas hablando acerca de sus emociones y pensamientos suicidas sin temor a ser juzgados.
- Se debe implementar programas educativos en los colegios, lugares de trabajo y en las comunidades para aumentar la comprensión sobre la salud mental y el suicidio.
- Es primordial asegurarnos de que las personas tengan fácil acceso a líneas de ayuda.
- Animar a quienes muestran signos de alerta a buscar ayuda profesional de inmediato.
- Promover relaciones fuertes y positivas dentro de las familias y comunidades.
- Promover la participación en actividades que mejoren el bienestar general, como el ejercicio, la meditación y los hobbies creativos.
- Realizar campañas en medios de comunicación y redes sociales para concientizar sobre la conducta suicida y reducir el estigma asociado.
- Proporcionar seguimiento y apoyo continuo a personas en riesgo incluso después de una crisis.
En última instancia, la prevención del suicidio es un esfuerzo continuo que requiere la colaboración constante entre diversos sectores de la sociedad. A través de la combinación de educación, comunicación abierta y un acceso mejorado a los recursos de apoyo, podemos contribuir a crear un entorno más solidario y comprensivo. Al hacerlo, no solo ofrecemos una red de apoyo a quienes están pasando por momentos difíciles, sino que también trabajamos hacia el objetivo mayor de salvar vidas y construir una sociedad más resiliente y empática.
Recuerda: Nunca es demasiado tarde para ofrecer una mano amiga, cada vida importa.
En Excelentemente “JUNTOS CUIDAMOS TU SALUD MENTAL”
Hade Tania Pillhuaman Corbetta
Interna de Psicología